El retorno de un Titán.

El pitcher cubano Aroldis Chapman había atravesado por una última temporada compleja, sus números con el conjunto de los New York Yankees no habían sido del todo satisfactorios. Incluso se tambaleaba su función de cerrador estelar ante su baja forma deportiva mostrada, y el ascenso de otras noveles figuras. La velocidad en sus lanzamientos ya no alcanzaba esas cimas terroríficas que hacían temblar a los bateadores rivales. Los minutos se transformaban en agonía para el holguinero pues su futuro atlético se desmoronaba ante su mirada.

La salida del conjunto de los Yankees se convirtió en un hecho y muchos lanzaron toneladas de pesimismo sobre Chapman. Decenas de opiniones hirientes auguraban el ocaso en MLB del zurdo cubano, pero no había nada más lejos de la verdad. Aroldis sabía que aún muchas hazañas esperaban por él, que era posible poder continuar mimando éxitos y alegrías.

Los Kansas City Royals le brindaron a Chapman un nuevo horizonte para soñar y acallar las críticas, y él decidió mostrar al mundo que aún era capaz de encumbrarse en el montículo navegando entre dificultades. Hizo una de las mejores preparaciones de su vida, pues era también una cuestión de desafío personal.

La temporada de 2023 dió inicio hace apenas unos días y ya Aroldis Chapman ha impactado a aficionados y expertos, pues se muestra como en sus mejores momentos. El «Misil Cubano» en dos actuaciones en las postrimerías de los desafíos ha dominado a su antojo a los contrarios. Lo que más ha impactado es que nuevamente ha logrado sobrepasar fácilmente las 100 millas por hora en varias ocasiones, llegando a registrar 104 en su última aparición. Ha regresado al sendero de lo inigualable, al paraíso de sus ansias.

Cuando todo parecía en tinieblas Aroldis Chapman nunca se rindió, cuando las palabras atacaron su voluntad no hizo caso y siguió batallando, hoy tanto sacrificio brinda su rostro amable para él. Bendiciones para Aroldis Chapman, como un guerrero incansable supo desterrar lo adverso y arropar la luz.

Por Jose Alberto Portela Aportela