Hay noches que no solo se viven, sino que se inscriben en la historia de la moda. Anoche, la firma Óscar de la Renta escribió una de ellas al conmemorar su aniversario, esta vez el 60, y por primera ocasión en la República Dominicana, el país que moldeó la sensibilidad, la estética y el imaginario de su fundador.

El escenario no pudo ser más elocuente: la Ciudad Colonial de Santo Domingo y, en particular, la imponente Fortaleza Ozama, transformada en un templo de elegancia, memoria e identidad

Allí se presentó la colección Pre-Otoño 2026, concebida como homenajecelebración y declaración cultural. Cada elemento -desde la locación hasta la música y el casting- respondió a una narrativa clara: honrar el legado de Óscar desde la tierra que lo vio nacer.

El legado vuelve a casa

El diálogo entre moda y arte fue uno de los grandes protagonistas de la noche. 

La casa comisionó seis obras originales a la artista británica Maxine Hart, quien por primera vez posó su mirada vibrante y contemporánea sobre paisajes dominicanos profundamente ligados a la vida de De la Renta.

  • El Alcázar de Colón, la antigua residencia del diseñador en Punta Cana, la Fortaleza Ozama, la icónica Calle El Conde y dos panorámicas del Caribe oriental se transformaron en pinturas que luego mutaron en estampados, dando vida a las telas de la colección.