La próxima vez que alguien necesite un examen médico, puede recibir una llamada de alguien como Ana: una voz amigable que puede ayudarle a prepararse para su cita y responder cualquier pregunta urgente que pueda tener.
Con su calma y calidez, Ana ha sido capacitada para tranquilizar a los pacientes, al igual que muchas enfermeras en Estados Unidos. Pero a diferencia de ellas, también está disponible para charlar las 24 horas, los siete días de la semana, en varios idiomas, desde hindi hasta criollo haitiano.
Eso se debe a que Ana no es humana, sino un programa de inteligencia artificial creado por Hippocratic AI, una de varias nuevas empresas que ofrecen formas de automatizar tareas que consumen tiempo y que normalmente realizan enfermeros y asistentes médicos.
Es la señal más visible de la incursión de la IA en la atención médica, donde cientos de hospitales están utilizando programas informáticos cada vez más sofisticados para monitorear los signos vitales de los pacientes, señalar situaciones de emergencia y activar planes de acción paso a paso para la atención, trabajos que anteriormente eran manejados por enfermeras, enfermeros y otros profesionales de la salud.
Los hospitales afirman que la IA está ayudando a sus enfermeros a trabajar de manera más eficiente mientras abordan el agotamiento y la falta de personal. Pero los sindicatos de enfermería argumentan que esta tecnología poco comprendida está anulando la experiencia de las enfermeras y degradando la calidad de la atención que reciben los pacientes.
«Los hospitales han estado esperando el momento en que cuenten con algo que parezca tener suficiente legitimidad para reemplazar a las enfermeras«, dijo Michelle Mahon de National Nurses United. «Todo el ecosistema está diseñado para automatizar, deshabilitar y, en última instancia, reemplazar a los cuidadores».
El grupo de Mahon, el sindicato de enfermería más grande en Estados Unidos, ha ayudado a organizar más de 20 protestas en hospitales de todo el país, presionando por el derecho a tener voz en cómo se puede utilizar la IA y protección contra la disciplina si los enfermeros y enfermeras deciden ignorar el consejo automatizado.
El grupo lanzó nuevas alarmas en enero cuando Robert F. Kennedy Jr., el nuevo secretario de salud, sugirió que los enfermeros de IA «tan buenos como cualquier médico» podrían ayudar a brindar atención en áreas rurales.
