Trump respondió por primera vez las preguntas de los periodistas desde que ganó la elección y obtuvo un segundo mandato, y aprovechó el momento para instar al gobierno del presidente Joe Biden a poner fin a la venta de porciones del muro fronterizo


Agencia AP

Palm Beach, Florida, EE.UU.17/12/2024 00:00 | Actualizado a 17/12/2024 00:00

El presidente electo Donald Trump dijo el lunes en una conferencia de prensa en su finca de Mar-a-Lago que sopesará la posibilidad de indultar al alcalde de la ciudad de Nueva York, Eric Adams, que detendrá la venta de material para la construcción del muro fronterizo y opinó sobre la oleada de avistamientos de drones sobre Nueva Jersey.

Trump respondió por primera vez las preguntas de los periodistas desde que ganó la elección y obtuvo un segundo mandato, y aprovechó el momento para instar al gobierno del presidente Joe Biden a poner fin a la venta de porciones del muro fronterizo que fueron adquiridas pero no utilizadas, amenazando con emprender acciones legales.

“Vamos a gastar cientos de millones de dólares adicionales en construir el mismo muro que ya tenemos”, dijo Trump. “Es casi un acto criminal”.

El evento del lunes dejó de manifiesto la manera en que Trump se ha colocado nuevamente en el centro del debate político a nivel nacional, semanas antes de su regreso al Despacho Oval. La sesión fue mucho menos combativa que algunos de los acalorados intercambios que sostuvo con la prensa durante su campaña. Aparentemente relajado desde el estrado, bromeó con algunos de los periodistas que reconoció y habló de lo sencillo que ha sido la transición en comparación con su primer mandato.

“La primera vez, todos peleaban conmigo”, dijo. “Esta vez todos quieren ser mis amigos”.

Después de pasar gran parte de las últimas semanas lejos de la atención pública dentro de su finca, Trump utilizó la conferencia para poner a prueba algunas de sus ideas políticas, atacar a sus enemigos y advertir sobre lo que está por venir.

Eso incluyó la amenaza de presentar una demanda contra Ann Selzer, una reconocida encuestadora de Iowa, cuyo último sondeo antes de las elecciones subestimó considerablemente el apoyo al republicano en el estado, el cual terminó ganando.

“En mi opinión, fue fraude e interferencia electoral”, afirmó Trump sobre la encuesta. Selzer, a quien no se pudo contactar para que comentara al respecto, anunció el mes pasado que dejaría de lado su operación de encuestas, pero que esa decisión la había tomado antes de los comicios.

En más amenazas de tomar acciones legales, Trump criticó al gobierno de Biden por la venta de material para el muro fronterizo, diciendo que ha estado en comunicación con el fiscal estatal de Texas, Ken Paxton, y otros funcionarios del estado para debatir la posibilidad de exigir una orden de restricción.

El Congreso le exigió al gobierno de Biden el año pasado que se deshiciera del material del muro fronterizo que no había sido utilizado. La medida, incluida en la enorme Ley de Autorización de Defensa Nacional, permite la venta o donación de las piezas a los estados en la frontera sur, siempre que se utilicen para renovar las barreras existentes, no para instalar nuevas. El Congreso también ordenó al Pentágono que cubriera los costos de almacenamiento del material del muro fronterizo mientras no se utilice.

“Le pido a Joe Biden que por favor deje de vender el muro”, dijo Trump.

Si bien Trump describió el cambio de gobierno entre Trump y su equipo como “una transición amistosa”, también se mostró en desacuerdo con la decisión de permitir que algunos miembros del gobierno federal sigan trabajando desde casa. Aunque la Casa Blanca rechazó los señalamientos de que el gobierno federal otorgaba exenciones a los trabajadores para trabajar desde casa durante los próximos cinco años, la Administración del Seguro Social recientemente alcanzó un acuerdo sindical que permite que algunos empleados trabajen desde casa de dos a cinco días por semana.