Elon Musk ha conseguido que el presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, le encargue «desmantelar» del aparato burocrático del país y recortar «al menos 2 mil millones de dólares» del presupuesto del Gobierno. Muchos se preguntan si es posible y si su repentina estrecha relación sobrevivirá a sus egos.
«Estoy encantado de anunciar que el gran Elon Musk, junto con el patriota estadounidense Vivek Ramaswamy, liderará el Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE en inglés)», declaró el pasado 12 de noviembre Trump en un comunicado.
A lo que Musk añadió: «esto será una sacudida al sistema y a cualquier implicado en el despilfarro gubernamental, que es un montón de gente».
El nombramiento de Musk como «zar» a cargo de recortar billones de dólares del gasto público es la culminación de una alianza fraguada entre los dos empresarios en los últimos meses y que ha transformado al hombre más rico del mundo en un fervoroso promotor del trumpismo.
