La fiscalía estadounidense ha acusado a una empresa química china y a varios de sus empleados de exportar ilegalmente precursores del fentanilo, según el Departamento de Justicia, mientras Washington busca una mayor cooperación con Pekín para combatir el tráfico de este opioide sintético.

Hubei Aoks Bio-Tech Co. Ltd., con sede en Wuhan, fue acusada por un gran jurado federal de 13 cargos vinculados a la venta de precursores de fentanilo para fabricar millones de pastillas destinadas al mercado estadounidense, informó el jueves el departamento en un comunicado.

«Esta acusación sostiene que una empresa, su director y su jefe de ventas obtuvieron beneficios económicos exportando a sabiendas materiales que contribuyeron a alimentar la crisis del fentanilo en nuestro país», declaró el fiscal federal Martin Estrada, según el comunicado.