Nathanael Pérez Neró .

La falta de entendimiento entre dueños y jugadores sobre cómo repartirse alrededor de US$10,000 millones tiene cerrada las Grandes Ligas sin ni siquiera fecha de reanudación de las conversaciones. Los peloteros sienten que la ingeniería financiera aplicada por los dueños en la última década les da cada vez menos del pastel y tienen guardadas municiones para una guerra larga.

En el tope de las peticiones se encuentra reducir al menos un año al tiempo de servicio que debe de cumplir un jugador para lograr la libertad que representa la agencia libre. La unión plantea una segunda opción de que el pelotero si llega a los 29.5 años de edad obtenga su boleto a la agencia libre, aun haya llegado tarde a la liga.

De acuerdo al sindicato de jugadores (MLBPA en inglés) en 2005 la carrera promedio de un jugador que alcanzaba la liga llegaba a 4.79 años y a 2019 había bajado a 3.71 años. En los primeros tres años el jugador está sujeto a ganar el salario mínimo y los siguientes tres puede debatirlo en arbitraje.

¿Cómo quedan los dominicanos en ese histórico en una ecuación que requiere aparecer 172 días en roster de 26 hombres para completar un año? El calendario de la serie regular es de 187 días y se requieren de 1,032 días en nómina para alcanzar los seis años.

Hasta 2015, es decir, hace seis temporadas, llegaron a las Grandes Ligas 659 peloteros con matricula quisqueyana. De ese grupo solo 169 ha conseguido completar los seis años de servicios o lo mismo que el 25,6%.

Luis Severino (5,170), Ketel Marte (5,162), Gary Sánchez (5,086), Hanser Alberto (5,085), Jorge Polanco (5,024) y Manuel Margot (5,012) se pueden unir al club la próxima campaña.

Que el sindicato le doble el pulso a los dueños y acepten bajar un año al aterrizaje en la agencia libre representaría que al menos 17 jugadores criollos, entre ellos cotizadas figuras como Rafael Devers (4,070), Amed Rosario (4,062), Teoscar Hernández (4,097), Luis Castillo (4,101) y Frankie Montás (4,015) se convirtieran en agente libre al final de la próxima estación y no después de 2023, lo que reconfiguraría el mercado. Juan Soto (3,134) adelantaría su libertad a 2023 en lugar de 2024 en lo que podía ser el primer jugador que supera los US$400 millones en contrato.Más pequeño

Existe un abismo entre los bigleaguers criollos que alcanzan los seis años de servicios y aquellos que superan el mínimo de tres para debatir sus salarios en arbitraje.

Hasta 2018 alcanzaron la Gran Carpa 758 dominicanos de los cuales hubo 312 que completaron los tres años. Se trata del 41%, visto al revés, el 59% de los que llegó no consiguió superar el umbral del sueldo mínimo. Es el punto que el sindicato quiere corregir.